Desde el momento en que desperté, sentí una llama ardiente en mi corazón, como un fuego incontrolable encendido por el amor de Dios. Cada día le he pedido a Dios que encienda mi corazón, que arda solo por Él, deseando su toque transformador que me permita caminar según su voluntad.
En ese preciso instante, una canción resonó en mi alma: «¡Hazme de nuevo! Toma mi corazón, mi amado, Jesús, mi amor». Quiero que sepas que horas después escuché esa canción, se titula «Menos de mí, más de ti» y es interpretada por Grupo Grace con Aron Moises. Te invito a que la escuches mientras lees esta carta, porque sé que mientras lo haces, el amor perfecto de Dios impregnará tu ser de adentro hacia afuera.
Hoy, Dios quiere decirte:
Eres mío y yo soy tuyo. Te pido que entregues tus palabras, pensamientos, todo lo que has hecho, tus logros, tus temores, tus títulos y todo lo que eres, ríndete a mis pies. No hay nada más grande que Yo. Soy el dador de vida y hoy he venido a soplar vida sobre ti.
Sé que has tenido dudas acerca de mis planes para ti. Ha habido momentos en los que ves el futuro en tonos grises y te desanimas pensando que solo es para «los privilegiados». Pero quiero que sepas que no hay favoritos, eres mi hijo y eres heredero de la vida. Todo lo que la vida trae consigo es para ti. Permíteme acercarme a ti y tocar tu cabeza, porque todo lo que necesitas es un toque mío. Cuando te toco, transformo tu mente, traigo calma a tu alma y dirijo tus pasos para que sigas mis caminos.
Ven aquí, déjame moldearte de la manera en que siempre soñé para ti.
Con amor, El Alfarero de tu Alma